La adopción plena debe asegurar una familia a un niño/a que se encuentra desprovisto/a de ella, haciéndolo circular de una situación familiar a otra. Esta circulación se efectúa según el dictamen del Convenio de la Haya a fin de prevenir cualquier tipo de trafico infantil: el niño/a debe estar desnudo/a de sus lazos de parentesco para poder encontrar unos nuevos y afiliarse en otra ascendencia.
En este texto plantearé algunas cuestiones sobre cuáles son, durante el proceso completo de la adopción, los estatus del adoptado/a �de un bien puesto en circulación a una persona�.
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