La Virgen Negra de Montserrat: historia y origen de su representación plástica y su culto

• Autores: Kazuaki Awa
• Localización: Estudios de arte español y latinoamericano, Nº. 12, 2011, págs. 42-52
• Idioma: varios idiomas
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• Resumen

  • Por ser un lugar sagrado de aparición mariana, desde la Edad Media, el Santuario de Montserrat es ampliamente conocido en España y en especial en la región de Cataluña. En la capilla de su monasterio se encuentra el símbolo del lugar del milagro: la imagen de la Virgen, datada del S. XII, objeto de veneración a lo largo de los siglos, no sólo por parte de los monjes, sino también por innumerables peregrinos y devotos.

    Esta escultura de la Virgen Negra de Montserrat (“La Moreneta”: de una altura de 95cm, tallada en madera, pintada) representa a una figura, tipo “Maiestas Domini”, sentada en el trono en posición frontal, juntas las rodillas y sosteniendo al Niño Jesús en su regazo. Su fisonomía románica es reflejo de un espíritu piadoso. El hecho de que la piel de la propia Virgen, al igual que la del Niño Jesús, esté pintada de negro, haciendo de ella una “Virgen Negra” y dotándola de un aura original y misteriosa, es lo que también seduce y fascina a quienes la contemplan.

    En relación con la Virgen Negra de Montserrat, en lo que sigue a continuación en este texto: (1) se constatarán nuevamente, a través de la comparación con otras imágenes de la Virgen de la época, las características plásticas propias del Románico Catalán; así mismo se repasará la historia de su culto a la luz del análisis de diversas obras originarias de Montserrat. (2) Se indagará una de las vetas de los orígenes (raíces) aún ignotos de esta Virgen Negra, a través del estudio de su relación con las imágenes de las diosas madre del paganismo del antiguo Mar Mediterráneo, que se extendieron desde Marseille, en el sur de Francia, por los Pirineos, y, en especial, con la figura de la diosa negra, Isis.