Resumen de Prevalencia global del cáncer de próstata: ¿Qué nos pueden enseñar los estudios de autopsias sobre esta peculiar enfermedad?.
Alexandre R Zlotta, Cynthia Kuk
El cáncer de próstata (CaP) representa una gran carga para la salud pública en el mundo occidental. Es una enfermedad peculiar porque mueren más hombres con él que por él. También es interesante que el CaP fue virtualmente desconocido durante siglos hasta el siglo XX. Los estudios aleatorizados de cribado del CaP han delineado los riesgos de sobrediagnóstico y sobretratamiento del cáncer latente. Existen diferencias geográficas significativas en la incidencia y mortalidad, siendo supuestamente menor entre los varones asiáticos en comparación con los caucasianos. En algunas áreascomo Corea y Japón, se han observado cambios que no pueden explicarse fácilmente por el cambio de los procedimientos diagnósticos y los aumentos en la mortalidad pueden ser debidos a cambios en estilos de vida y dieta. Recientemente hemos estudiado y comparado la prevalencia de CaP entre varones caucasianos (CAU) de Moscú, Rusia, y asiáticos (ASI) de Tokio, Japón. Elegimos una población caucasiana específica en Rusia, con poca exposición al sol y una dieta rica en grasas, pero sin cribado de PSA generalizado. Los datos de autopsias en los países occidentales (Norteamérica y Europa) habrían sido contaminados ampliamente debido al cribado de PSA oportunista. El cribado en varones asiáticos es poco frecuente. Se extrajeron las próstatas en bloque con las vesículas seminales en las primeras 24 horas después de la muerte y fueron analizadas completamente (secciones perpendiculares con intervalos de 4 mm) por una uropatólogo experto en Toronto. Se encontró CaP en autopsia en una proporción similar de varones rusos caucasianos y japoneses. Más del 50% de los cánceres son Gleason ? 7 en japoneses y cerca del 25% en rusos caucasianos planteando interrogantes sobre 1) asunciones previas relacionadas con el CaP en asiáticos y 2) la noción de cáncer significativo frente a no significativo. Los estudios en autopsias son la llave para mejorar nuestra comprensión de este cáncer tan curioso.
