Resumen de Cine y televisión: negocios de familia

• Las relaciones entre cine y televisión en Europa, donde veremos la mejorable situación española; y, por otro lado, los casos de Francia, Italia, Reino Unido o Alemania (países que han sabido establecer fructíferos acuerdos entre sus emisoras y la industria cinematográfica), están marcadas por dos objetivos irrenunciables: proteger el cine frente a la competencia televisiva y fomentar la producción audiovisual. Alrededor de estas dos premisas giran todas las medidas que regulan la convivencia de ambos medios. El camino recorrido desde que en los años 50 se dieran los primeros pasos para que ambos sectores convivieran de manera provechosa ha estado lleno de curvas y baches, aunque la conciencia por las dos partes de estar embarcadas en una misma aventura ha mantenido, con más o menos respeto, y según en qué países, el apoyo mutuo. Pero no todo se limita a los intereses comerciales y económicos. La concepción europea de que la obra audiovisual forma parte de la cultura de cada país y el reconocimiento de los derechos de autor han hecho que se trate con especial cuidado la integridad de las obras y se intente proteger el derecho moral dentro de la regulación de la relaciones entre cine y televisión