El retablo de Juan de Juni de la Iglesia de Santa María la Antigua: algunas consideraciones en torno a su relación con los franciscanos vallisoletanos

• Autores: Noriko Matsubara
• Localización: Estudios de arte español y latinoamericano, Nº. 15, 2014, págs. 1-14
• Idioma: varios idiomas
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• Resumen

  • El espléndido retablo mayor de la Catedral de Valladolid fue tallado por el escultor Juan de Juni, figura representativa de la escuela castellana del siglo XVI. En realidad a Juni le habían contratado este retablo para la cercana parroquia de La Antigua. Allí estuvo hasta principios del siglo XX, cuando fue trasladado a la catedral, con motivo de las obras de restauración de la citada iglesia.

    A pesar de que es una de las obras más importantes de este escultor de origen francés, todavía faltan estudios más profundos sobre las circunstancias que rodean el origen de esta obra, el tema y el planteamiento iconográfico de este conjunto escultórico. Es notable la abundante documentación relacionada con esta obra, sin embargo las investigaciones se han centrado principalmente en el tema del contrato y el pleito surgido entre Juni y otros artistas.

    Aunque el contrato para la realización del retablo fue suscrito entre Juni y la parroquia, la idea originaria de esta obra aparece en el testamento de una dama que fue enterrada en el presbiterio. Este testamento, que apenas ha sido citado en estudios realizados hasta la fecha, confirma que el retablo fue dedicado a la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Por otra parte, tanto el testamento como otros documentos relacionados atestiguan la estrecha relación que había entre esta dama y su familia, y el desaparecido convento vallisoletano de San Francisco, que era el principal de la provincia franciscana de Castilla, denominada "la Provincia de la Purísima Concepción de Nuestra Señora".

    Un cuidadoso examen del retablo y su iconografía nos ha hecho caer en la cuenta de que el tema principal de la Inmaculada Concepción está simbólicamente desarrollado en la verticalidad de las figuras que aparecen en la calle central. Algunas imágenes del retablo y su distribución reflejan la influencia de los franciscanos que promovían de una manera especial la devoción a María bajo esta discutida advocación.