La seguridad ha tomado el relevo a la velocidad. La máquina fiable ha robado protagonismo a la máquina de espectáculo en el discurso publicitario. Se ha convertido en el principal y más atractivo argumento de venta. Este cambio, surgido hace poco en nuestro país, tiene su origen en la nueva concepción que los fabricantes de automóviles han comenzado a aplicar en sus productos. Los sistemas de seguridad son ahora el eje central del diseño automovilístico más avanzado. Paralelas a esta iniciativa de las grandes marcas convergen otras circunstancias como el endurecimiento de las regulaciones de tráfico y la mayor conciencia del consumidor sobre el uso racional del coche.
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