Se han realizado varias campañas de aforos en los diferentes arroyos de la cuenca de Fuente de Piedra a lo largo del año hidrológico 1997/98 y se ha obtenido un coeficiente de escorrentía del 10, 55% que puede considerarse representativo del conjunto de la cuenca en un año húmedo. La aportación superficial a la laguna, en este periodo fué de 7, 7 hm³/año. Los hidrogramas de los arroyos a la entrada de la laguna presentan, como respuesta a las lluvias de invierno, unas crecidas muy rápidas, con puntas que superan los 3 m³/s (en el arroyo de mayores dimensiones) y unas decrecidas igualmente rápidas. Estas riadas tienen poca duración y un agotamiento rápido. En las primeras crecidas, la mayoría de los arroyos son perdedores con respecto al acuífero. Posteriormente suelen ser ganadores por la aportación procedente de los acuíferos y de las zanjas de drenaje existentes en la cuenca. En el estiaje, las zanjas de drenaje dejan de aportar agua a los cauces y éstos quedan completamente secos. En algún arroyo se mantienen durante más tiempo los caudales superficiales debido al drenaje de pequeñas cuencas endorreicas conectadas a los cauces mediante zanjas artificiales y a la aportación recibida desde el acuífero antes de su desembocadura a la laguna.
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