Introducción. Se ha descrito que el blanqueamiento y los procesos erosivos reblandecen la superficie dental, posiblemente aumentando su susceptibilidad a la abrasión por el cepillado. Los autores han realizado un estudio del efecto que tiene sobre el esmalte y la dentina la combinación de los efectos producidos por el blanqueamiento, la erosión y la capacidad abrasiva del dentífrico.
Métodos. Los autores prepararon muestras de esmalte humano y dentina radicular y las distribuyeron aleatoriamente en ocho grupos que se blanquearon con peróxido de carbamida al 10% y se sometieron a erosión y abrasión por el dentífrico. Los autores sometieron las muestras a ciclos de erosión, cepillado y blanqueamiento durante cinco días. Utilizaron la profilometría para valorar los cambios producidos en la superficie dental.
Resultados. La erosión y la acción del dentífrico más abrasivo aumentaron el efecto de desgaste del cepillado sobre la superficie del esmalte, mientras que el blanqueamiento no produjo ningún efecto deletéreo. El desgaste de la dentina aumentó también después de someterla a erosión y el uso del dentífrico más abrasivo. Cuando se utilizó el dentífrico menos abrasivo, el blanqueamiento aumentó el desgaste en dentina no erosionada y lo disminuyó en dentina erosionada.
Conclusión. El blanqueamiento no aumenta la susceptibilidad del esmalte al desgaste erosivo y abrasivo, independientemente del dentífrico que se utilice. El desgaste de la dentina estuvo modulado por la interacción del blanqueamiento, la erosión y el dentífrico.
Implicaciones clínicas. El blanqueamiento con peróxido de carbamida al 10% no aumenta el desgaste erosivo del esmalte. Sin embargo, puede cambiar el desgaste abrasivo de la dentina, dependiendo de la intensidad de la acción erosiva y abrasiva.
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