El desarrollo de las nuevas tecnologías, además de avance y progreso, trae consigo nuevas figuras delictivas.
Aunque no es fácil dar una definición de delitos informáticos, podríamos decir que son todos aquellos que consisten en la realización de actividades a cabo conductas que se cometen mediante el empleo de la informática o vulnerando los derechos de un usuario de la misma.
En la investigación de los delitos informáticos pueden verse afectados los derechos fundamentales del infractor, tales como el derecho a la intimidad personal y familiar, el derecho al secreto de las comunicaciones, la inviolabilidad del domicilio y el derecho a la protección de sus datos personales.
Y por ello sólo se puede acceder a tal información mediante autorización judicial.
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