Tras la elaboración de una guía de trabajo forense que defi niera tanto una organización como una secuencia vertebrada de la respuesta forense integral a la violencia de género a modo de protocolo, y para dar cumplimiento a la disposición adicional segunda de la Ley Orgánica 1/2004 relativa a la organización de las unidades de valoración forense integral, se planteó la necesidad de crear un instrumento informático que fuera capaz de asumir todos los retos que requerían las nuevas pruebas forenses.
Para ello, se consideró básico que dicho instrumento, al que se llamó Asklepios, fuera capaz de asumir los diversos papeles que el momento requería. Necesitaba unir los textos de la propia ley con los objetivos de la prueba forense en el procedimiento, así como las muy especiales características de las personas a quienes se debía evaluar, víctimas y agresores.
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