Entre risas complacientes, reconoce ser más poeta que músico, como Dylan. Más allá de comparaciones odiosas, el maño Sergio Orta Durand, alias Puritani, desparrama sobre los escenarios arte con mayúsculas, caramelizado con buenas dosis de gastronomía, algo de música y sobre todo mucha poesía. Un cóctel explosivo que sigue dándole muy buenos resultados y fieles seguidores. Transgresor y solo levemente tangencial con las poses establecidas, su arte abre nuevos y sofisticados horizontes a lo cultural.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados