Los próximos días, el juez José Castro fijará la fianza de responsabilidad civil a la que deberán hacer frente Iñaki Urdangarín y Diego Torres por el presunto desvío de 6,1 millones de euros de las administraciones balear y valenciana que, entre 2004 y 2007, contrataron los servicios del Instituto Nóos. La Fiscalía y la acusación particular piden 8,2 millones de euros y los imputados se oponen defendiendo su inocencia. A la espera de la decisión del titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de la Audiencia de Baleares, el yerno del rey intenta hacer acopio de efectivo para evitar un posible embargo. Los duques de Palma dicen adiós a la época de las vacas gordas despidiéndose del palacete de Pedralbes a bordo de su viejo Volkswagen Golf.
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