Triple terapia inmunosupresora en coroidopatía serpiginosa recurrente

• Autores: Carlota Ramos Fernández, S. Miranda Fernández, I. García Oliva, Félix Manuel Francisco Hernández, Juan J. Ramos Ramos
• Localización: Annals d'oftalmologia: òrgan de les Societats d'Oftalmologia de Catalunya, Valencia i Balears, ISSN-e 1133-7737, Vol. 19, Nº. 4, 2011, págs. 230-235
• Idioma: español
• Títulos paralelos:
  • Triple agent immunosuppression in recurrent serpiginous choroidopathy
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• Resumen
  • español

    Introducción: El tratamiento de la coroiditis serpiginosa es actualmente controvertido dada la elevada tasa de recurrencias descritas. Según varias publicaciones el tratamiento durante largos períodos con agentes inmunosupresores a bajas dosis, comparado con el tratamiento exclusivamente corticoideo, parece reducir la tasa de recurrencias. Se presenta el caso de una paciente que tras 31 meses de tratamiento con triple terapia inmunosupresora (Prednisona, Ciclosporina A y Azatioprina) no ha presentado recidiva alguna.

    Caso clínico: Paciente con coroiditis serpiginosa bilateral y recurrente de cuatro años de evolución. Todos los brotes agudos fueron tratados con prednisona oral (1 mg/Kg/día). Como secuela presentaba gran cicatriz coriorretiniana en área macular del ojo derecho (AV: cd 2m); y lesiones atróficas, también pigmentadas, a nivel de arcada temporal superior y en haz papilo-macular en ojo izquierdo (AV: 6/10). Fue remitida a nuestro servicio por presentar nuevo episodio de pérdida de agudeza visual en ojo izquierdo (AV: 3/10) a pesar de tratamiento corticoideo a altas dosis.

    Dado el elevado número de recurrencias y las secuelas, se decidió instaurar triple terapia inmunosupresora (prednisona, ciclosporina A y azatioprina). En los controles periódicos realizados se ha observado recuperación de la agudeza visual en ojo izquierdo (9/10), estabilización de la enfermedad sin inflamación intraocular y buena tolerancia a la medicación tras 35 meses de tratamiento.

    Conclusión: Consideramos la triple terapia inmunosupresora como el tratamiento inicial para la coroiditis serpiginosa severa, antes de que aparezcan secuelas irreversibles dado que los corticoides sistémicos acortan los brotes agudos pero no disminuyen la frecuencia de recidivas.

  • English

    Introduction: Because of high recurrences, the management of serpiginous choroiditis is notoriously challenging. Therapy includes a combination of inmunomodulatory agents, including steroids, seem to reduce percentage of recurrences.

    We report a case treating with the usual immunosuppressive therapy (prednisone, azathioprine, cyclosporine A) during 35 months which did not have any recurrences.

    Case report: A patient diagnosed with bilateral, recurrent and four years evolution serpiginous choroiditis. Every active phase were treated with systemic steroids (prednisone 1mg/kg/d). Right posterior pole showed areas of chorioretinal atrophy with macula involvement and in the left eye, the lesion occupied the inferior papillomacular bundle with a temporal edge abutting the fovea. Despite corticosteroids systemic, she was remitted to our service presenting a new episode of visual blurring in the left eye (AV 3/10). Because of all these high number of recurrences and the complications, combination with immunomodulatory agents was done (prednisone, azathioprine and cyclosporine). In the regular controls we achieved an increased vision in the left eye, immediate disease control and after 35 months a good tolerance of treatment.

    Conclusion: Corticosteroids are usually used to gain immediate control in the acute phase, but do not seem to reduce an effect on preventing recurrences or long-term control. Our experience suggests that inmunomodulatory agents are an effective initial therapy for severe serpiginous choroiditis.