Las pinzas de Kalt, Elschnig, Arruga (y la nuestra, que aunque hace uso de fuerzas angulares, por su gran abertura, puede equipararse en sus efectos a las tres primeras citadas), emplean un sistema de fuerzas paralelas y opuestas. Su inconveniente repercute en la práctica, disminuyendo el número de extracciones in toto, principalmente en las cataratas intumescentes o con gran tensión capsular, por ser muy difícil o imposible plegar la cápsula al patinar la pinza. Este inconveniente se evita o disminuye empleando fuerzas angulares, cuyas componentes, tengan aisladamente una incidencia de 45º, sumadas las dos fuerzas, 90º. Con esta incidencia se obtiene una resultante la más útil y eficaz que permite por la mayor fuerza de reabsorción o tracción extraer intracapsularmente cristalinos, en los que fracasan las pinzas de superficies planas o de fuerzas paralelas. Nuestro segundo modelo de pinza hace uso de fuerzas que, sumadas, forman un ángulo de 90º, en lugar de 135º, que es la abertura angular de la pinza que dimos a conocer el año 1929. Como despista bastante la abertura angular de las pestañas, por sus dimensiones tan reducidas, se puede dar una buena idea de la misma, haciendo uso de los gráficos que empleamos para indicar los ejes de los cilindros, trazando los correspondientes ejes que coincidan con la incidencia de las pestañas.
Quinta sesión científica. Día 17, a las nueve y media. Preside el Prof. Pérez Llorca, J.
Discusión y réplica de esta comunicación págs. 317-322.
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