Los incendios de los bosques que asolaron Australia a principios del mes de febrero y que causaron más de doscientos muertos no están viculados directamente al cambio climático pero, como estiman muchos expertos, es evidente que éste ha desempeñado un papel importante. Este país es uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero por habitante. ¿Pero cómo se pueden tomar medidas eficaces cuando los lobbies de las industrias más contaminadoras están metidos en el seno mismo del Gobierno?
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