Recién inaugurado el año, nos encontramos con el primer plato fuerte de la temporada. EL ÚLTIMO SAMURÁI posee los ingredientes necesarios para convertirse en un gran éxito cinematográfico: una estrella de renombre (Tom Cruise) katana en mano; un director eficiente (Ed Zwick) con cierta predilección por cintas épicas ("Tiempos de gloria", Leyendas de pasión") y un presupuesto de más de 100 millones de dólares para redondear un proyecto de altura. Una historia sobre una cultura milenaria, una tradición legendaria, un código de conducta y una forma de vida basada en el honor.
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