Uno de los problemas en ingenieria civil es la presencia de cavidades desconocidas en las etapas de proyecto. No siempre es posible inferir la continuidad de las que se conocen. o simplemente se desconoce si bajo un terreno se han desarrollado cavidades o dolinas. Mediante las técnicas de geofísica es posible obtener en muchos casos la posición, tamaño relativo y tipología (rellenas. inundadas, vacías) de las mismas a través de propiedades indirectas del subsuelo (físicas). En el presente trabajo se describe una de estas técnicas: el georadar o radar geológico. EI georadar es un instrumento que emite una onda electromagnética que viaja por el terreno, choca con las anomalías (tuberias, zonas de vacio o grandes discontinuidades geológicas superficiales) se refleja y regresa a una unidad de recepción y análisis de la señal. La calidad de los resultadas difiere enormemente según el tipo de medio per el cual viajan las ondas. La litología del encajante influye sobremanera en la disipación de la energía y la calidad del registro. En general con una antena de media frecuencia tipo 400 Mhz en arcillas y terrenos húmedos que disipan la señal, se alcanzan unos escasos 2 ó 3 metros de investigación, a menudo no más de 1,5 m); por el contrario en calizas, calcarenitas y yesos se pueden obtener excelentes registros hasta unos 6- 8 metros. Para mayores profundidades se emplean las antenas de baja frecuencia, máss voluminosas. Se presenta la metodología de estos trabajos, así como los resuitados positivos obtenidos en terrenos yesíferos y calizos.
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