El rugby es un deporte de equipo y de contacto. Uno de los métodos para cuantificar el perfil de actividad de este tipo de deportes es el análisis de movimiento e intensidad del ejercicio. Diferentes investigaciones han sido analizadas a lo largo del presente trabajo, establecido que el rugby es un deporte intermitente con un juego caracterizado por la alternancia de actividades de alta y baja intensidad. Las diferencias en cuanto a la reglamentación, hacen probable que las demandas de carrera y características de los impactos puedan ser distintas entre modalidades, sobre todo en rugby sevens, y por lo tanto la organización de los entrenamientos y sus exigencias deberían ser específicas y adaptadas a las mismas. Para optimizar los regímenes de entrenamiento de los jugadores de rugby, hay que conocer y entender las demandas físicas a las que son sometidos durante el transcurso del partido.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados