El aparato respiratorio del cerdo, como el de otros mamíferos consta de una porción conductora y una porción respiratoria donde tiene lugar el intercambio gaseoso. Las estructuras que componen estas vías poseen una organización general, constituida por un epitelio respiratorio ¿pseudoestratificado cilíndrico ciliado con células caliciformes¿, lámina propia de tejido conjuntivo, tejido de sostén representado por anillos de cartílago hialino unidos en sus extremos por fibras musculares y una adventicia de tejido conectivo. Esta organización básica se va modificando conforme se profundiza en el parénquima pulmonar, perdiendo el tejido cartilaginoso y disminuyendo en altura el epitelio hasta convertirse en un epitelio simple plano en las vías respiratorias. Dispone de una serie de mecanismos de defensa que actúan intentando mantener el equilibrio del sistema para cumplir su función principal de intercambio gaseoso: el aparato mucociliar traqueobronquial, macrófagos alveolares e intravasculares, y el sistema inmune humoral por medio de las inmunoglobulinas A, M y G, con predominio de una y otras en las diferentes porciones del aparato respiratorio, así como el mecanismo de defensa celular, constituido por linfocitos (T y B), células K, células dendríticas, complejo de histocompatibilidad, algunas de ellas aún sin un completo conocimiento de su mecanismo de acción. Conociendo la estructura y funciones del sistema respiratorio, se esquematiza como participan, e interactúan cada una de las células y sus productos liberados en la respuesta inmune del aparato respiratorio.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados