En los últimos años se ha incrementado el número de ciudadanos que reclaman el derecho a que sus datos personales desaparezcan de los índices que ofrecen los buscadores de Internet, es decir, a que se reconozca su derecho a ser olvidado. En este sentido, la Agencia Española de Protección de Datos ha dictado más de noventa resoluciones relacionadas con Google, instándole a que retire los enlaces que los demandantes consideran perjudiciales. El buscador se niega a retirar los contenidos alegando censura y ha recurrido ante la Audiencia Nacional cinco de estas resoluciones. El caso es pionero y el fallo podría sentar un precedente en otros países donde se encuentra abierto el mismo debate.
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