El volumen de nuestra Deuda pública era preocupante a medidados del siglo XIX. En el contexto de la crisis económica de 1847-1849, Juan Bravo Murillo decidió solucionar este problema desde su entrada en el Ministerio de Hacienda, y tras un concienzudo examen, presentó en las Cortes un proyecto de arreglo en febrero de 1851. La supuesta ausencia de recursos para su ejercicio llevó al Diputado por el Distrito de Pañafiel, Millán Alonso (miembro de la Comisión de dictamen), a formular voto particular del mismo, ampliamente discutido en el congreso y que contribuyó a la disolución de la Cámara. Después de superar algunas dificultades, el proyecto fue aprobado por unas nuevas Cortes, y se convirtió en la Ley el 1 de agosto de 1851.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados