El papel, el soporte creativo por excelencia desde hace siglos, ha experimentado importantes cambios en las últimas décadas con la aparición de otro tipo de páginas, concretamente, las interactivas, las cuales se han revelado como un soporte óptimo para desarrollar acciones de comunicación y creatividad. No es extraño, por tanto, que las empresas papeleras hayan decidido rentabilizar Internet para continuar mostrando la calidad y posibilidades de ese otro formato que, aunque clásico, no consigue ser desbancado ni siquiera por aquellos que propugnan la defensa a ultranza de los bosques o la tecnología. Sin duda, las políticas de gestión ambiental y la presencia en Internet son los dos retos a los que las empresas papeleras se enfrentan en este nuevo siglo y, por ahora, tanto en uno como en otro caso, han demostrado estar a la altura.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados