Contribución española a la construcción de la paz. Razones y propuestas para la elaboración de un Plan de Acción

• Autores: Luis Peral
• Localización: Documentos de Trabajo FRIDE, Nº. 7, 2005
• Idioma: español
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• Resumen

  • Durante los últimos años, los Estados democráticos y desarrollados, las Naciones Unidas y las organizaciones regionales, muy especialmente la Unión Europea, están reforzando sus capacidades civiles para contribuir a la creación de condiciones de paz y estabilidad social y a la reestructuración democrática en países afectados por conflictos armados, o por situaciones de grave crisis y colapso institucional. Este documento de trabajo propone que España se incorpore plenamente a esa tendencia, asumiendo la responsabilidad, e incluso en ciertos casos el liderazgo, que le corresponde. Las razones están relacionadas con la rápida evolución del marco europeo de acción y con los compromisos efectivamente asumidos por España, teniendo en cuenta las carencias que aquí se analizan tanto en el plano institucional como en cuanto a la disponibilidad y previsibilidad en el ámbito de las capacidades civiles. Según esta propuesta, el modo más adecuado de lograr la incorporación española a las nuevas tendencias es la elaboración de un Plan de Acción a partir de la evaluación de la labor realizada y de las previsiones y los compromisos de contribución futura. Toda vez que la dimensión militar de la acción española está considerablemente desarrollada, y que está en marcha un proceso de reforma legislativa y de organización que afectará a esa dimensión, el Plan debe concentrarse en la creación y consolidación de capacidades civiles y en el modo en que estas se articulan y se coordinan con las capacidades militares. Así, debe contener los conceptos básicos y los objetivos de la acción exterior española en materia de gestión internacional de crisis, hasta configurar una doctrina española al respecto. En la elaboración y seguimiento de ese Plan han de participar todos los actores potencialmente implicados, pero además su puesta en práctica requeriría adaptar y en algún caso ampliar el marco institucional hoy existente. El Plan debe convertirse en el puente o la bisagra entre dos instrumentos recientemente aprobados por el Gobierno español, la Directiva de Defensa Nacional y el Plan Director de la Cooperación al Desarrollo, lo que facilitaría la coherencia de la acción exterior española en el ámbito de la solidaridad internacional. Este documento ofrece una primera aproximación a cada una de estas cuestiones.