La precariedad laboral ha pasado de ser considerada una inquietud sindical a una realidad incuestionable que afecta mayoritariamente a los jóvenes, a los inmigrantes y a las mujeres. Este sistema pretende evitar la intervención de los sindicatos en las empresas y en la organización del trabajo: cuanto más pequeña es la plantilla de una empresa, más complicada es la actividad sindical en la misma, facilitando al empresario someter al trabajador que se ve muy dificultado para reclamar sus derechos. Asimismo, la escandalosa subcontratación en cadena permite a las empresas esquivar todo tipo de obligaciones fiscales y de personal, eludir obligaciones sociales y ahorrar costes salariales, y lo que es más dramático, evitar responsabilidades en materia de salud y seguridad de los trabajadores.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados