Resumen de "Caudillismo" als Konstante der politischen Kultur Lateinamerikas?
En este ensayo se trata de delinear algunos cambios significativos en las estructuras sociales de los estados latinoamericanos que conducen a reducir la importancia del caudillismo, contradiciendo así las tesis corrientes que ven en este fenómeno un factor constante de la política de América Latina. Además se quiere demostrar que la conclusión de C. Till y también tiene cierta validez para el subcontinente americano. Según ésta, en Europa, desde el principio del siglo XIX, la violencia difusa y reactiva practicada por individuos o pequeños grupos fue sustituida gradualmente por formas de violencia planeadas y metódicas que eran ejercidas por organizaciones grandes. En primer lugar se constata que existen opiniones diversas sobre el poder explicativo del caudillismo como concepto, según se lo considere un factor permanente del proceso político o un fenómeno del siglo pasado. Aquí se define el caudillismo como un tipo de dominación autoritaria sin arraigo institucional, que se basa fundamentalmente en el liderazgo personal. En la segunda parte se muestra como una sede de cambios estructurales en el siglo XX reduce las posibilidades de despliegue del caudillismo: la integración nacional se intensifica, la estructura social se vuelve más diferenciada y más compleja, surgen nuevas lealtades y organizaciones socio-políticas intermedias alcanzan mayor importancia. Este proceso va acompañado por una creciente despersonalización de la violencia que se manifiesta en la profesionalización del ejército, en un cambio de los métodos y de los fines de la violencia, así como en la selección de las víctimas según criterios que tienen en cuenta la pertenencia a ciertos grupos sociales o entidades y no la calidad del individuo como tal. Se afirma que, aunque con esta evolución el caudillismo como principio de estructuración política haya perdido importancia, no se pueden ignorar ciertos desarrollos particulares. Respecto a éstos, se sostiene, hay que tener en cuenta que una de las bases del caudillismo, las relaciones de dependencia personalizadas, aún persiste, que el caudillismo sigue siendo una fuerza preponderante en los países pequeños con estructuras socio-económicas atrasadas, mientras que en los países más avanzados elementos del caudillismo pueden lograr vigencia cuando surgen movimientos sociales que todavía no poseen una forma organizada estable.
