A partir del año 2000 se han producido cambios significativos en la evolución de los flujos migratorios que venían accediendo a España desde principios de los años noventa. La corriente de inmigrantes procedentes de países en vías de desarrollo se ha intensificado y comienza a superar de forma notablemente progresiva la de inmigrantes procedentes de países desarrollados. Una buena parte de los inmigrantes de ambas corrientes se convierte en parte estructural de nuestra población, y, consecuentemente, cierto número de ellos decide trabajar por cuenta propia buscando un mayor asentamiento en nuestra sociedad. Este artículo constituye una contribución singular al estudio de este fenómeno y proporciona datos que muestran el peso de la actividad emprendedora inmigrante en el proceso emprendedor español, así como algunas de sus características más relevantes. Para ello se han utilizado como fuente de información principal los resultados que se derivan del Observatorio GEM en España durante 2005 y 2006
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