En los países desarrollados la energía nuclear proporciona un significado porcentaje de la electricidad que se genera. A pesar del rechazo que suscita en la opinión pública y los problemas que presenta (residuos y riesgo de proliferación), será difícil que países como Japón, Canadá, Francia o, incluso, España renuncien a ella, debido al final del petróleo barato y el agotamiento de algunos recursos como el carbón y el gas, cuyo precio está ligado al del petróleo. Además, países emergentes como India, China o Corea (sin contar con Irán) empiezan a apostar por la energía nuclear.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados