Eliminación de residuos integrada: nuevas perspectivas

• Autores: Mauro Gandolla
• Localización: Residuos: Revista técnica, ISSN 1131-9526, Año nº 16, Nº 92, 2006, págs. 22-27
• Idioma: español
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• Resumen

  • Desde que existe la vida, existen los residuos. Al principio, y para las formas de vida menos evolucionadas, los residuos eran sustancialmente los desechos del metabolismo: los excrementos. Actualmente, y para las formas de vida más evolucionadas, se han añadido los residuos de las actividades desarrolladas por los individuos; en el caso de la sociedad antrópica, los residuos urbanos, los de la construcción y los industriales.

    Muchas especies animales y, en particular, el hombre, tienden, por instinto, a desembarazarse de sus propios residuos 'de la mejor forma posible', intentando evitar cualquier posterior contacto con los mismos, abandonándolos en el medio ambiente.

    Este comportamiento del género humano es la causa principal del retraso acumulado en el campo de las técnicas de eliminación (como por ejemplo en la construcción y gestión de los vertederos). Además, especialmente en el pasado, y en parte aún hoy, el citado comportamiento ha incrementado la discriminación de las clases sociales que tienen algo que ver con los residuos: es indiscutible que, aún en nuestra sociedad muy evolucionada, los economistas, los abogados, los médicos, los electrónicos, los arquitectos, los planificadores, etc., gozan de un mayor respeto por parte de la población que los especialistas en la correcta eliminación de los residuos. A pesar de ello, precisamente estos últimos son determinantes para la supervivencia de los primeros y, sobre todo, de las generaciones futuras.

    En 1854, el jefe indio Seattle, en un discurso que se le atribuye ante el Congreso de los EEUU, al dirigirse a la población blanca emergente, pronunciaba las siguientes frases:

    "...También los blancos desaparecerán; quizás antes que todas las demás tribus. Infectad vuestros lechos, y una noche os encontraréis ahogados por vuestros desechos... ¡Es el fin de la vida y el inicio de la supervivencia!" Hagamos que el citado discurso contribuya a abrirnos los ojos y que no sea una profecía de nuestro futuro.