En los momentos actuales existen poderosas razones para que el economista _sea o no investigador_ se plantee y analice los problemas metodológicos de política económica que anidan en la base misma de la ciencia económica. Si bajo otras circunstancias históricas podría resultar disculpable no plantearse ciertos problemas metodológicos o resolverlos vía argumento de autoridad, la progresiva especialización científica llevada a cabo dentro del campo económico y las frecuentes confusiones entre el "ser" y "debe ser" en la literatura económica, justifican sobradamente la ineludible necesidad del economista actual de clarificar y depurar de algún modo el complejo y zigzagueante camino que recorre la ciencia económica en nuestros días.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados