Han tenido que pasar once años desde el fin de la Guerra Fría para que Europa empiece finalmente a reconocer lo ocurrido en 1989: el retorno al viejo continente de nuestros vecinos orientales. Desde la caída del muro de Berlín se debate la importancia de crear un espacio europeo de paz, democracia y prosperidad. El mejor camino para lograrlo es una Europa unida económica y políticamente, en la que el régimen democrático, la economía de mercado, la justicia y el respeto a los derechos humanos se presentan como claves del proceso. La Conferencia Intergubernamental mantenida en Niza (diciembre 2000) es el primer intento serio de adaptar las estructuras y funcionamiento de la actual Unión Europea a la ampliación a los doce países candidatos del Este y Mediterráneo. María Andrés realiza una lectura política de los cambios institucionales llevados a cabo en la cumbre francesa, analizando las nuevas perspectivas de la próxima ampliación europea y el papel que España podría desempeñar en el proceso, a la vista de su próxima presidencia del Consejo Europeo en el 2002.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados