A pesar de que seria fácil coincidir en señalar la función educativa como la más importante de cuantas pueden asignársele a la escuela, al menos desde el punto de vista del educador, existen ciertos elementos a los que los profesores aluden para argumentar que tal función educativa, más allá de la mera instrucción, se ve dificultada y, acaso, impedida: esos elementos son los que he llamado mitos. "Los mitos de la escuela". En las páginas siguientes he intentado identificar y describir algunos de ellos con el único afán de "desmitificarlos", de sacarlos de la Aprivacidad del discurso docente y mostrar que no son otra cosa más que escudos tras los que nos protegemos de la presión y de la soledad que sienten muchos profesores en el desempeño de sus funciones y que nos impiden, a veces, encontrar el camino.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados