Se estudia el uso que hace Marcial de una técnica de ordenación de los epigramas consistente en la yuxtaposición de composiciones aparentemente dispares en tono y contenido pero que tienen llamativos ecos léxicos entre sí. Se ponen como ejemplo dos pares de epigramas del libro IV (18 y 19; 32 y 33), a la luz de cuyo análisis conjunto se aportan nuevas posibilidades de interpretación, no sólo en lo que respecta a estos poemas en particular, sino también, en sentido más amplío, a la plasmación de las concepciones estéticas del poeta.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados