Santa muerte y masculinidad. Manifestaciones de una relación inevitable

• José-Luis Anta Félez ^[1]
  1. [1] Universidad de Jaén

     Universidad de Jaén

     Jaén, España

     
• Localización: III Congreso internacional sobre masculinidades e igualdad: Comunicación, cultura y medios / coord. por Universidad Miguel Hernández de Elche, 2025, ISBN 978-84-18177-93-4, págs. 440-454
• Idioma: español
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• Resumen

  • La película mexicana El Infierno sirve como un recurso cultural para ilustrar y profundizar en estas relaciones entre la Santa Muerte, el narcotráfico y las masculinidades. Aunque la Santa Muerte no aparece explícitamente en la película, los temas de la violencia, la muerte y las jerarquías de poder que atraviesan la narrativa reflejan las dinámicas simbólicas que configuran el culto. La película expone cómo la muerte se convierte en un lenguaje y una herramienta de poder en las culturas del narco, una lógica que encuentra resonancia en los rituales y significados asociados a la Santa Muerte. Al mismo tiempo, la representación de las masculinidades en la película, marcadas por la violencia y la necesidad de demostrar autoridad, dialoga con el simbolismo de la Santa Muerte como figura mediadora entre la vida y la muerte. Este análisis revela cómo el culto a la Santa Muerte y las culturas del narcotráfico están profundamente entrelazados con las construcciones de género y las dinámicas de poder en contextos de precariedad y violencia. Para la antropología social, estos fenómenos son un campo de estudio clave para comprender las formas en que las comunidades marginadas negocian su lugar en el mundo, utilizando símbolos religiosos y culturales que trascienden las divisiones tradicionales entre lo sagrado y lo profano, lo masculino y lo femenino. La Santa Muerte, en este sentido, es mucho más que una figura devocional; es un espejo que refleja las tensiones, las resistencias y las afirmaciones que caracterizan la experiencia humana en los márgenes del poder. Este trabajo busca contribuir a una comprensión más amplia de cómo las prácticas religiosas y simbólicas se configuran como herramientas de supervivencia, negociación y resistencia en contextos de exclusión estructural.