Abstract

Resumen:

Este trabajo explora el paisaje rural como el locus donde directores como Oliver Laxe y Diana Toucedo filman la intimidad radical del sujeto y su relación, siempre en conflicto, con la comunidad, la familia y la historia. A partir de la imagen cinemática del paisaje muestro que el cine gallego que "piensa" lo rural construye un sujeto nacional y un territorio nacional que constata que ninguno de ellos logra estar plenamente en casa. Es decir, el paisaje rural les permite ofrecer una reflexión sobre una identidad dislocada, siempre en falta, y sujeta a lo que está más allá de sí misma y que pone en entredicho la propia figura histórica sobre la que se constituye la fantasía nacional. En los filmes de estos directores encontramos el paisaje rural de un mundo en desaparición, vaciado de su propia familiaridad, y abierto a una fisura existencial que inquieta al sujeto incluso cuando se siente en su propia casa.

Abstract:

This essay explores rural landscape as the locus in which directors such as Oliver Laxe and Diana Toucedo portray the radical intimacy of the subject and their conflictive relation with community, family and history. In this work, Galician cinema 'thinks' the rural by constructing a national subject and a national territory of unhomeliness, always subject to what is beyond and what calls into question the very historical possibility of national fantasy. In the works of these directors we encounter the rural landscape of a world in disappearance, emptied of its own familiarity, an opening to an existential fissure that disturbs subjectivity even when 'at home'. This is how films from the Novo Cinema Galego, such as O que arde y Trinta Lumes, compose an original and innovative corpus precisely as a result of their affective, political and existential gaze over rural space.

pdf

Share