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Resumen de León entre la tradición y la modernidad. La arquitectura de posguerra en la ciudad de León, 1937-1950

Javier Caballero Chica

  • español

    La presente tesis abarca el estudio de la arquitectura en la ciudad de León desde la elaboración del proyecto del Ensanche en 1897 hasta 1950 para obtener una visión global de la primera mitad del siglo XX, con el objetivo de evaluar la pugna estilística que se produjo entre la tradición y la modernidad arquitectónica durante la Guerra Civil y los años 40, como asunto prioritario de la investigación.

    Durante el primer tercio del siglo XX se valoró la importancia del nuevo condicionante urbanístico del Ensanche, así como las diversas modificaciones efectuadas en él, para satisfacer las demandas constructivas de la influyente burguesía del momento. Una pausada ocupación, especialmente en las vías principales dio como resultado un desarrollo compuesto por una variada configuración tipológica que abarcó desde los bloques residenciales, las viviendas individuales, la arquitectura sanitaria, escolar, industrial, comercial, religiosa o de servicios públicos. Los lenguajes empleados durante este período como antecedentes de la arquitectura tradicional de posguerra en León ―modernismo, eclecticismo, historicismo, regionalismo y academicismo―, configuran un epígrafe destacado del estudio con la intencionalidad de compendiar y discernir los gustos estilísticos de la burguesa leonesa. El siguiente paso viene dado por las primeras obras protorracionalistas proyectadas en la capital leonesa que tuvieron lugar durante la década de los años 20 de la mano de los arquitectos Antonio Flórez Urdapilleta y Gustavo Fernández Balbuena, que dejaron su impronta premoderna en obras tan significadas como la Escuela Normal de Maestros o El Casino, respectivamente.

    La entrada definitiva de la arquitectura moderna en León tuvo lugar en los años previos a la Guerra Civil, entre 1930 y 1936, con la incorporación del edificio de la Central Telefónica (1931), proyectado por Ignacio de Cárdenas Pastor y José María de Vega Samper, así como del proyecto del Grupo Escolar “Gumersindo Azcárate” (1934), obra de Guillermo Diz Flórez. Pero sin duda, los verdaderos artífices de la inclusión de las tendencias modernas en León fueron Ramón Cañas del Río y Juan Torbado Franco, que trabajaron juntos desde los inicios de los años 30, hasta 1945. El tercer arquitecto que también promovió ese bagaje racionalista y funcional fue Luis Aparicio Guisasola, los tres con la mirada puesta en la vanguardia europeísta y la consiguiente “revolución” moderna arquitectónica en contraposición a la tradición decimonónica.

    Con la llegada de la posguerra cierto sector de la historiografía moderna consideró la década de los años 40 con una etapa regresiva y yerma, con la supuesta consolidación de la arquitectura de “Estado o Imperial”, que el nuevo Régimen franquista quería implantar. No obstante, el propósito de la modernidad leonesa siguió vigente a través de una frágil continuidad en la codificación de un estilo racionalista y la renovación neo-empirista.

    Por otro lado, las regresiones burguesas destacaron en facilitar y allanar el camino en la búsqueda de esa pretendida arquitectura ideologizada y propagandística a través del eclecticismo neobarroco. Las indagaciones y la amplia recogida de información en los diferentes archivos, dio como resultado esa dualidad sincrónica entre tradición vs modernidad ―protagonizada en muchas ocasiones por los mismos arquitectos―, confrontación que acompañará reiteradamente los diversos capítulos de la tesis. Por ello, en la segunda parte de la misma se ha realizado un estudio de casos en ambas modalidades con la finalidad de cotejar las dos líneas de actuación y poder concretar de manera empírica la continuidad de la arquitectura moderna durante los años del conflicto bélico y durante la década de los 40 en la ciudad de León, lo que favoreció el acrecentamiento de este novedoso lenguaje durante los años 50.

  • English

    This thesis covers the study of architecture in the city of León from the elaboration of the Ensanche project in 1897 to 1950 to obtain a global vision of the first half of the 20th century, with the aim of evaluating the stylistic struggle that took place between tradition and modernity during the Civil War and the 1940s, as a priority research matter.

    During the first third of the 20th century, the importance of the new urban planning condition of the Ensanche was valued, as well as the various modifications made to it, to satisfy the constructive demands of the influential bourgeoisie of the moment. A slow occupation, especially on the main roads, resulted in a development adorned by a varied typological configuration that ranged from residential blocks, individual houses, sanitary, school, industrial, commercial, religious or public service architecture. The languages used during this period as antecedents of the traditional post-war architecture in León -modernism, eclecticism, historicism, regionalism and academicism-, make up a prominent epigraph of the study with the intention of summarizing and discerning the stylistic tastes of the Leonese bourgeoisie. The next step was taken by the first pro-rationalist works projected in the capital of Leon that took place during the 1920s by the architects Antonio Flórez Urdapilleta and Gustavo Fernández Balbuena, who left their pre-modern mark on works as significant as the Normal Teachers School or El Casino, respectively. The definitive entrance of modern architecture in León took place in the years before the Civil War, between 1930 and 1936, with the incorporation of the Central Telephone Station building (1931), designed by Ignacio de Cárdenas Pastor and José María de Vega Samper. , as well as the project of the School Group "Gumersindo Azcárate" (1934), the work of Guillermo Diz Flórez. But without a doubt, the true architects of the inclusion of modern trends in León were Ramón Cañas del Río and Juan Torbado Franco, who worked together from the beginning of the 1930s until 1945. The third architect who also promoted this rationalist and functional was Luis Aparicio Guisasola, all three with their eyes set on the European vanguard and the consequent modern architectural “revolution” as opposed to the nineteenth-century tradition.

    With the arrival of the postwar period, a certain sector of modern historiography considered the decade of the 40s as a regressive and barren period, with the supposed consolidation of the "State or Imperial" architecture, which the new Franco regime wanted to implement. However, the purpose of Leon's modernity remained in force through a certain continuity in the codification of a rationalist style and the neo-empiricist renewal. On the other hand, the bourgeois regressions stood out in facilitating and paving the way in the search for that alleged ideologized and propagandistic architecture through neo-baroque eclecticism. The investigations and the extensive collection of information in the different archives, resulted in that synchronous duality between tradition vs. modernity ―starred on many occasions by the same architects―, a confrontation that will repeatedly accompany the various chapters of the thesis. For this reason, in the second part of it, a case study has been carried out in both modalities with the purpose of comparing the two lines of action and being able to empirically specify the continuity of modern architecture during the years of the war and the 40s in the city of León, which favored the growth of this new language during the 50s.


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