Resumen de Evaluación de la calidad de los libros de texto para la equidad de género: Un estudio comparado entre libros publicados por la secretaría de educación pública y por editoriales privadas en México
El propósito general de este trabajo es evaluar, desde una perspectiva de género, la calidad de los libros de texto de Ciencias Naturales de sexto grado México, considerando para ello la visibilidad, posición y roles de las mujeres y la presencia de estereotipos de género en las imágenes y textos escritos de los libros de Ciencias Naturales. De forma complementaria, realizamos un estudio comparado entre los libros editados por la Secretaría de Educación Pública de México y los publicados por editoriales privadas a partir de indicadores de género que permitan medir el androcentrismo presente en los contenidos curriculares de la asignatura de Ciencias Naturales.
Con este fin, se realiza un análisis y comparación de seis libros de texto de Ciencias Naturales de sexto grado de educación primaria utilizados en México. Los libros analizados fueron elaborados por la Secretaría de Educación Pública y cuatro editoriales privadas, éstas fueron: Santillana, Castillo, Auroch y SM, de esta última se analizó el libro de texto propiamente y el cuaderno de actividades. De cada uno de los textos se analizaron tanto las imágenes como los textos escritos.
De un total de 1523 imágenes, se seleccionaron sólo las que presentaban figuras de personas claramente definidas sexualmente, fueran fotografías o dibujos, siendo éstas 310; lo que representa el 20.35% del total.
Para el análisis de los textos seguimos las recomendaciones de Nieves Blanco (2000) que aconseja analizar temas o núcleos de mayor interés y propone, en los textos de ciencias naturales, los temas relacionados con la reproducción, siendo precisamente este contenido el que se incluye en el bloque I de cada libro. Por esta razón, se analizaron todos los párrafos de este bloque de cada libro, resultando una muestra de 1022 párrafos. Se toma como unidad mínima de análisis el párrafo, considerando en el caso de las actividades, cada actividad completa en conjunto como un solo párrafo ya que están constituidas por pasos que carecen de sentido por sí solos. De este modo, y según su función en el texto, la muestra de textos está constituida por 424 párrafos de contenido, es decir, que desarrollan conceptos o aportan información declarativa, 513 párrafos que describen actividades y en los que se aporta información al alumnado sobre acciones que deben realizar y propósitos de un tema y que hemos denominado “destacados”.
Los resultados muestran que, aunque en algunos de los libros de texto se pudo constatar cierto equilibrio en el tratamiento de mujeres y hombres en las imágenes, la desigualdad entre personas de distinto sexo en las ilustraciones, sigue siendo un problema aun no resuelto en los libros de texto de Ciencias Naturales utilizados en el sexto grado de educación básica en México.
Sigue habiendo un desequilibrio que favorece a los personajes de sexo masculino, que reproduce la invisibilidad de las mujeres en muchas de las esferas de la vida social mexicana y que, tiene la agravante, de que se trata de un fenómeno que, como la violencia, por ser cotidiano, se va haciendo normal en esta sociedad.
Los libros editados por la Secretaría de Educación Pública no son un paradigma a seguir por parte de otras editoriales privadas cuyos textos son utilizados por millones de niñas y niños mexicanos, a pesar de que esta Secretaría haya tenido convenios de colaboración con instituciones como INMUJERES y con el Programa Universitario de Estudios de Género de la Universidad Nacional Autónoma de México, para la elaboración de los mencionados textos escolares.
El desequilibrio antes mencionado no se manifiesta sólo en la mayor frecuencia con que aparecen personajes masculinos con respecto a los personajes femeninos, sino también, por los roles que estos personajes desempeñan y por consiguiente, por el mensaje gráfico que envían a sus lectores, que en este caso se trata de niñas y niños adolescentes.
El trabajo intelectual y el espacio público, siguen estando reservados para los hombres, mientras que las mujeres aparecen en la mayoría de los casos en espacios privados y desempeñando labores de índole doméstica.
De igual manera, los estereotipos de género son una constante en las imágenes que observan las niñas y los niños en sus libros de Ciencias Naturales de sexto grado. Estos mediadores didácticos tan importantes en el proceso de enseñanza aprendizaje, no garantizan un aporte significativo para el cambio necesario en la formación del estudiantado desde una perspectiva de género.
Con respecto al lenguaje escrito la situación es semejante. Es evidente el uso sistemático de un lenguaje que refleja un carácter androcéntrico de la ciencia, pues en esta rama del saber, no aparece el aporte que las mujeres han realizado y sí, el carácter estereotipado de hombres más racionales que las mujeres y en el epicentro de desarrollo científico, están presentes a lo largo de todos los textos.
A lo anterior, se suma el tradicional uso del masculino genérico para hacer referencia tanto a hombres como a mujeres, en todos los textos de manera sistemática, lo que hace patente una invisibilidad de las mujeres, de manera igualmente sistemática.
Como conclusión final, los libros de texto de Ciencias Naturales que usan las niñas y los niños de sexto grado de educación básica en México, no tienen la calidad necesaria para satisfacer las exigencias que en la actualidad se reclama a los sistemas educativos en aras de lograr una formación adecuada en un tema tan emergente como lo es, las concepciones que futuras generaciones tengan sobre la llamada equidad de género.
