Resumen de El foco de escultura romanista de Miranda de Ebro: Pedro López de Gamiz y Diego de Marquina
Introduce el concepto de escultura “romanista” a partir de estudios de Azcárate, Martín González, García Gainza, Arrázola y el mismo autor del libro, teniendo como referencias previas las esculturas de Miguel Ángel, Ordóñez, o Siloe, seguidas por las de Berruguete, Juni y Becerra. Así se produce una implantación uniformadora del romanismo escultórico que evoca referencias miguelangelescas y detalles de otros italianos, como Sansovino, Piombo, Rustici, Fontana o Bandinelli, que será bien asumido para la expresión artística de la de la Iglesia trentina.
Entre las grandes implantaciones de ese estilo artístico destaca el País Vasco y Castilla. En la provincia de Burgos, la catedral, el monasterio de Las Huelgas, y varias poblaciones conservan obras del azpeitiano Juan de Anchieta. Y en el enclave singular de Miranda de Ebro se establecen lazos de La Rioja, País Vasco y Castilla, destacando la obra de unos escultores romanistas que desde Miranda atienden a comitentes del norte peninsular.
Pedro López de Gámiz es autor destacado de retablos como el de Bardauri, Briviesca, Estavillo, Ircio, Vileña, y varias tareas de tasador.
Diego de Marquina trabajó para diversos lugares de las diócesis de Burgos y Calahorra. Nacido en Miranda el año 1542, se relacionó con Juan de Anchieta y López de Gámiz. Destaca su obra en el cercano monasterio premostratense de Bujedo de Candepajares, cuyo retablo desaparecido es aquí diseñado a partir de su contrato. También realizó el retablo del monasterio de Retuerta, a orillas del Duero, casa matriz de la orden premostratense en España, obra parecida a la de Bujedo, que fue trasladada al monasterio vallisoletano de la Santa Espina. Más intervenciones de Marquina fueron en el entorno de Miranda, como Ozana, Añastro y otros lugares.
Añade finalmente la referencia a Juan Bautista Celma y su obra junto a Miranda, en la iglesia de Oyón, para la capilla del compostelano Cardenal Martínez Ternero, nacido aquí cuya reja y retablo le fue encargado al maestro aragonés.
