En el presente trabajo tratamos de diseñar la difícil relación del derecho penal con el derecho de familia, por las distintas esencias y naturalezas de cada uno de ellos de idear un nuevo modelo de proceso penal. Entendemos que la tutela de los individuos que se encuentran más indefensos dentro de la familia, debe pasar por superar los viejos mandatos del principio acusatorio del siglo XIX dando entrada al principio de oportunidad. Asimismo, se estudian dos casos particulares sobre el “parentesco procesal penal”, actualmente controvertidos.
Por un lado, la dispensa del debe de declarar del art. 416 LECrim y, por otro, la excusa absolutoria del art. 268 CP. Debemos apostar por evitar las funestas consecuencias de la entrada del derecho penal en el ámbito familiar, siendo lo más razonable deslindar el bien jurídico a proteger y medir la actuación del Estado, el para qué y el por qué. Dignificación y redefinición del derecho penal familiar, un nuevo reto para el legislador.
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