Ayuda
Ir al contenido

Resumen de Estatus epileptico, revision de un complejo problema neurologico y su abordaje multidisciplinario

Luis Andrés Dulcey, Héctor Moreno Parra, Juan Sebastian Theran Leon, John Castillo, Raimondo Caltagirone, Edgar Blanco, Rafael Perales Marín, Maria Ciliberti

  • español

    El estado epiléptico (EE) es una emergencia neurológica frecuente asociada con una alta morbimortalidad. De acuerdo con la nueva definición de ILAE 2017, EE resulta de la falla de los mecanismos responsables de la terminación o el inicio de las convulsiones, lo que lleva a convulsiones anormalmente prolongadas. La definición tiene diferentes puntos de tiempo para EE convulsivo, focal y de ausencia. Hay cambios en los receptores sinápticos que conducen a un estado más proconvulsivo y mayor riesgo de lesión cerebral y secuelas de larga duración. El manejo del EE debe incluir tres pilares: detener las convulsiones, estabilizar a los pacientes para evitar lesiones secundarias y tratar las causas subyacentes. El EE convulsivo se define a los 5 minutos y es una urgencia mayor. Las benzodiazepinas son el tratamiento inicial, y deben administrarse rápidamente ya una dosis adecuada. Fenitoína/fosfenitoína, levetiracetam y ácido valproico son opciones de evidencia para el tratamiento de segunda línea. Si el EE persiste, los fármacos anestésicos son probablemente la mejor opción de tratamiento de tercera línea, a pesar de la falta de evidencia. El midazolam suele ser la mejor opción inicial y se deben considerar los barbitúricos para los casos refractarios. El estado epiléptico no convulsivo tiene un enfoque inicial similar, con benzodiazepinas y agentes intravenosos (IV) de segunda línea, pero después de eso, la agresividad debe equilibrarse considerando el riesgo de lesión debido a convulsiones y complicaciones médicas causadas por un tratamiento agresivo. Por lo general, el mejor enfoque es el uso de fármacos antiepilépticos intravenosos secuenciales (la vía oral o por sonda son opciones si las opciones intravenosas no están disponibles). La monitorización EEG es crucial para el diagnóstico del SE no convulsivo, tras el control inicial del EE convulsivo y el control del tratamiento.Recibido: 13/2/2022Aceptado: 4/4/2023

  • English

    Status epilepticus (SE) is a frequent neurological emergency associated with high morbidity and mortality. According to the new ILAE 2015 definition, SE results either from the failure of the mechanisms responsible for seizure termination or initiation, leading to abnormally prolonged seizures. The definition has different time points for convulsive, focal and absence SE. Time is brain. There are changes in synaptic receptors leading to a more proconvulsant state and increased risk of brain lesion and sequelae with long duration. Management of SE must include three pillars: stop seizures, stabilize patients to avoid secondary lesions and treat underlying causes. Convulsive SE is defined after 5 minutes and is a major emergency. Benzodiazepines are the initial treatment, and should be given fast and an adequate dose. Phenytoin/fosphenytoin, levetiracetam and valproic acid are evidence choices for second line treatment. If SE persists, anesthetic drugs are probably the best option for third line treatment, despite lack of evidence. Midazolam is usually the best initial choice and barbiturates should be considered for refractory cases. Nonconvulsive status epilepticus has a similar initial approach, with benzodiazepines and second line intravenous (IV) agents, but after that, aggressiveness should be balanced considering risk of lesion due to seizures and medical complications caused by aggressive treatment. Usually, the best approach is the use of sequential IV antiepileptic drugs (oral/tube are options if IV options are not available). EEG monitoring is crucial for diagnosis of nonconvulsive SE, after initial control of convulsive SE and treatment control. Institutional protocols are advised to improve care.


Fundación Dialnet

Dialnet Plus

  • Más información sobre Dialnet Plus