a comida, el vestido, la música, las costumbres y tradiciones, la literatura y las maneras de hablar, así como los hábitos de consumo de medios de comunicación, forman parte del complejo espacio cultural de la frontera México-Estados Unidos, en d que se generan, entrecruzan, fusionan y se oponen identidades y visiones del mundo y de la vida que no tienen paralelo en d interior de las dos naciones divididas política y artificialmente por esa línea. ¿Entonces qué se puede decir de la importancia estratégica de los medios de comunicación en la frontera norte y de su impacto en la conformación de una región cultural singular? El autor del presente artículo ofrece evidencias de que los medios de comunicación no parecen ser primordiales en la construcción de una cultura y una identidad fronteriza y que tampoco parecen reflejarla de manera sistemática.
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