Resumen de Las estructuras prefabricadas ante la acción sísmica
Ángel Ortiz Bonet, Luis Vega Catalán
Existe la creencia de que las estructuras prefabricadas de hormigón son especialmente sensibles ante la acción sísmica, y de hecho ciertas exigencias normativas en este tipo de situaciones pueden obstaculizar el empleo de la prefabricación como solución óptima.
Al contrario que en otras situaciones accidentales —como es el caso del fuego en el que esa debilidad no existe, sino al contrario— la existencia de una normativa excesivamente exigente, poco profunda a la hora de definir prestaciones, y claramente asimétrica en su consideración de las estructuras metálicas respecto a las de hormigón, puede crear esa apariencia de debilidad. Sí es cierto que resulta necesario adoptar una serie de medidas en las estructuras prefabricadas en zonas sísmicas, pero esas medidas pueden llegar, en su grado máximo, a proporcionar un comportamiento monolítico idéntico al de las estructuras tradicionales, y en su grado mínimo a dar suficiente resistencia (aunque el cálculo lleve a aumentar la dimensión de los pilares).
En cualquier caso, no están justificadas prohibiciones o tratamientos normativos discriminatorios que no distingan entre los distintos tipos de estructuras prefabricadas. En este artículo se analizan, a la luz de esta idea, las futuras normas NCSE y EN-1998, y se recomienda la sustitución de prescripciones genéricas por exigencias de detalles específicos para las diversas soluciones estructurales.
