No tratamos, en estas breves e intrascendentes notas, de establecer precisiones o determinar solución a un problema �el de la traducción del ibero� que por ahora no la tiene; ni siquiera aportar resultados de investigación que pudieran conducir a ello. Nos consideraríamos sobradamente satisfechos con lograr poner en orden algunos conceptos barajados con frecuencia, más o menos apasionadamente, y que han creado un estado de confusión que conviene aclarar; es decir, en el de por sí excesivamente confuso problema, salvar, al menos, la claridad de conceptos por nosotros creados y que utilizamos con alcance y apreciaciones diversas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados