Enfermedad profesional en el deporte español. Comparativa con otros países

• Autores: José E. Abril Guiote, Francisco Esparza Ros, Francisco de la Torre Olid
• Localización: Archivos de medicina del deporte: revista de la Federación Española de Medicina del Deporte y de la Confederación Iberoamericana de Medicina del Deporte, ISSN 0212-8799, Vol. 28, Nº. 146, 2011, págs. 422-434
• Idioma: español
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• Resumen

  • En España, el número de enfermedades profesionales (EP) notificadas a nivel general es muy bajo. Se ha estimado que cada año se estarían produciendo en España cerca de 80000 nuevos casos de EP. En comparación con los datos registrados, las citadas cifras equivaldrían a una subdeclaración superior al 50%. Los datos se pueden extrapolar a otros países. El motivo del estudio, es realizar una investigación sobre la notificación de enfermedades profesionales a nivel del mundo deportivo, ya que siendo el deporte una profesión prolija en denominación de enfermedades con nombre propio, véase codo de tenista, codo de golf, rodilla del saltador, hombro del nadador, etc, se observa una notificación anecdótica en este sector. El estudio se realiza en diferentes bases de datos tanto nacionales como internacionales en el ámbito de la medicina laboral. A nivel nacional se investiga en las bases de datos de diferentes organismos oficiales y mutuas de accidentes de trabajo y enfermedad profesional (MATEPSS). Se comparan los datos con otros países y se intenta profundizar sobre las posibles causas y consecuencias de esta infranotificación. Se analizan también diversos factores que con cierta particularidad envuelven al mundo laboral deportivo y que dificultan aún más en este sector tanto la notificación como la obtención de incapacidad laboral.

    El interés por parte de los trabajadores, en este caso concreto de los deportistas profesionales, en la notificación de su enfermedad como causa ocupacional, es debido a que existen diferencias con respecto a la enfermedad común en cuanto a la compensación económica y a la atención sanitaria.

    En España, el trabajador recibe un subsidio menor si la dolencia que padece se reconoce como enfermedad común.