Resumen de Rubalcaba-Griñán, matrimonio de conveniencia: Zarrías, Pizarro y Toscano, por libre en el ala crítica andaluza
Uno tiene el poder orgánico, el otro el poder institucional. Rivalizan, se molestan el uno al otro, pero ambos se necesitan. Por eso, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, y el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, han reeditado, a regañadientes, su pacto de no agresión en el reciente congreso de los socialistas andaluces. Un acuerdo que le ha dado al Presidente andaluz el crédito suficiente como para poder hacer y deshacer a su antojo en el partido regional y marginar la oposición de los críticos, ya por libre, encabezados por Zarrías, Pizarro y Toscano. A cambio, Griñán echa un cable al equipo de Rubalcaba, cada vez más criticado por su forma de ejercer una oposición que muchos consideran demasiado "blanda", como se demostró la semana pasada, en el Parlamento
