Las aportaciones a la zona regable del río Júcar condicionan la conductividad de la Albufera porque recibe las aguas sobrantes de ríego. Se ha observado una relación inversa entre ambas variables. La demanda de agua para otras zonas pretende satisfacerse a partir del trasvase de los sobrantes de riego basándose en una mejora de la eficiencia del regadío. Estas actuaciones deben realizarse sólo cuando se aseguren previamente las aportaciones necesarias para mantener la calidad del lago.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados