El artículo se propone analizar los argumentos lanzados por Perez Zagorin contra las posibles consecuencias del postmodernismo para la historia tal como hoy es concebida. En la respuesta se sostiene que es necesario corregir" los típicos errores de interpretación del postmodernismo cometidos por él. Las "correcciones" presentan el argumento de que dicha teoría indica el posible "fin de la historia", no sólo en sus estilos metanarrativos sino también en ese particular y peculiar género profesional que Zagorin considera equivalente a la historia per se. Además, se argumenta que si esta teoría se entiende de un modo que elija no renunciar al "discurso de la emancipación" después del fracaso de su primer intento en el "experimento de la modernidad", dicho final entonces se puede considerar como "algo bueno".
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