Ayuda
Ir al contenido

Dialnet


Caracterización y estado de alteración química de los materiales empleados en la construcción de la Catedral de Sevilla

  • Autores: Miguel Ángel Bello López
  • Directores de la Tesis: Antonio Martín Pérez (dir. tes.)
  • Lectura: En la Universidad de Sevilla ( España ) en 1988
  • Idioma: español
  • Número de páginas: 318
  • Tribunal Calificador de la Tesis: Emilio Galán Huertos (presid.), Manuel Callejón Mochón (secret.), José Luis Pérez Rodríguez (voc.), José Manuel Cabrera (voc.), Jose Francisco Vale Parapar (voc.)
  • Materias:
  • Enlaces
    • Tesis en acceso abierto en: Idus
  • Resumen
    • La piedra se utiliza ampliamente desde hace muchos siglos como material básico en la construcción de obras monumentales. Las estructuras de piedra, aún siendo más “duraderas” que aquellas de otros materiales, están sometidas siempre al ataque por agentes naturales, si bien los daños se producen generalmente en el transcurso de espacios grandes de tiempos. Sin embargo, las actividades humanas de la moderna sociedad industrializada ha contribuido, de manera casi inadvertida, a una aceleración dramática de la degradación de estructuras pétreas pertenecientes a obras históricas hasta el punto de que en muchos casos es posible percibir claramente año a año la alteración de monumentos construidos hace centurias e incluso milenios.Tal es el caso de la Catedral de Sevilla, el mayor edificio de toda la arquitectura gótica, sólo superado por la Basílica de San Pedro del Vaticano y por la de San Pablo en Londres. Ubicada en el centro urbano, está rodeada por vías de alta densidad de tráfico: los valores de SO2 y de otros contaminantes atmosféricos en los alrededores del edificio superan con creces la media anual de dicha ciudad.Las lluvias, que en Sevilla pueden ir acompañadas de vientos de SW, que provocan el azote por agua de la Catedral, el hecho de que la capa freática se encuentre a escasa profundidad, lo que se traduce en una importante ascensión y la elevada humedad relativa en la zona, con nieblas frecuentes durante una buena parte del año, con lo que se favorece los ciclos de instalación y disolución de sales, etc; son todos ellos factores de alteración naturales importantes en la Catedral de Sevilla. Con la lenta acción destructora de los factores colaboran, de una manera altamente eficaz, los contaminantes atmosféricos: En forma de gases, provenientes principalmente de los combustibles usados en los motores de vehículos que circulan y aparcan por los alrededores del monumento, y en forma de materiales pulverulentos que los vientos predominantes en Sevilla arrastran hacia la Catedral procedentes de los muelles próximos.La corrosión antropogénica, que parece ser la alteración más representativa, la de mayor significación, en el estado actual de deterioro de la Catedral, debe producir cambios sustanciales en la naturaleza macro y macroquímica de los materiales pétreos y en su estructura y textura, como consecuencia de procesos químicos fruto de la contaminación ambiental.Los objetivos establecidos inicialmente para la investigación que se propone como Tesis Doctoral al Tribunal, fueron los que consideran a continuación.En la investigación sobre las causas químicas de alteración de las piedras de la Catedral de Sevilla era necesario conocer no sólo el objeto a conservar, la “piedra”, a través de sus características, esencialmente de tipo químico, sino también investigar los mecanismos de alteración que han tenido lugar sobre la piedra y que son precisamente los que deben prevenirse, o al menos disminuir sus efectos, mediante los adecuados tratamientos de conservación.Una adecuada caracterización, mineralógico-petrográfica de la piedra exige la identificación de las canteras de procedencia de los materiales pétreos empleados en la construcción de la Catedral de Sevilla, necesaria, además para la caracterización química y física de los materiales pétreos, a través de ensayos y experiencias de laboratorio que requieren cantidades relativamente altas de material, que no pueden extraerse del propio monumento sin daños significativos.El examen de la superficie y, en ocasiones, de microzonas de la misma, quizás sea la mejor forma de estudiar la alteración de un material pétreo, ya que se trata generalmente de procesos superficiales. Dicho estudio puede efectuarse por microscopia óptica y, para la observación de topografías de superficies complejas, por microscopia electrónica de barrido.Una comparación ente muestras alteradas y sin alterar puede mostrar los cambios químicos que ha sufrido la piedra en su composición superficial macro y microquímica en distintas partes del monumento y, con ello, correlacionar los datos de análisis con la alteración.De indudable interés en el estudio de las piedras alteradas es el análisis de las sales solubles presentes en las mismas y la investigación de su distribución.Finalmente, la investigación de los morteros, que unen los elementos estructurales pétreos de las paredes de los edificios, constituye una tarea fundamental en el estudio de la conservación de los edificios históricos, por su indudable repercusión en la misma, esencialmente por el posible aporte de sales solubles y los materiales pétreos adyacentes y por la posibilidad de constituir un factor de incompatibilidad química.


Fundación Dialnet

Dialnet Plus

  • Más información sobre Dialnet Plus

Opciones de compartir

Opciones de entorno