Se trata de un estudio sobre la presencia colonial fenicia y púnica en varios asentamientos y factorías de Marruecos, entre los siglos VIII a.C., y siglo I d.C. Este trabajo pretende actualizar los conocimientos sobre el estado de arqueología en Marruecos hasta hoy en día. Son tres las épocas sometidas a la investigación, una época fenicia desde el siglo VIII al siglo V a.C. Y luego una época púnica comprendida entre el siglo V y III a.C. Y finalmente una época de la monarquía Mauritana entre el siglo III a.C., y el siglo I d.C.
Este trabajo se divide en dos partes, una teórica, que trata el tema de la colonización fenicia y púnica en Marruecos, revelando aspectos de la vida religiosa, reflejada en los templos existentes de la religión fenicia y púnica sin omitir la religión norteafricana considerada como indígena local. En este trabajo se hace un también un estudio al mundo funerario poniendo en relieve la tipología de enterramientos y la variedad relacionada a la práctica funeraria sea la originaria del mundo semita o la indígena norteafricana y las tipología de tumbas. Esta parte teórica cuenta con estudio sobre el debate sobre la función política y comercial de Marruecos dentro del Círculo del Estrecho que une Marruecos con la Península Ibérica. También un estudio sobre el periplo de Hannón como documento exclusivo sobre Marruecos. Fue más importante el estudio realizado sobre las navegaciones antiguas en el litoral marroquí, poniendo en evidencia las rutas marítimas en las costas mediterráneas y atlánticas que unen Marruecos con otros puertos del Mediterráneo Occidental y Central. Debido a la importancia de la población indígena marroquí durante la época púnica, se ha realizado una investigación sobre la estructura social y sus componentes semitas, y sobre la Monarquía Mauritana que arrancó hacia el siglo III a.C., revelando una temprana organización política y una solida economía en la Mauritania Tingitana.
Una segunda parte práctica, que incluye datos arqueológicos, numismáticos e epigráficos sobre ciudades, factorías y establecimientos hallados tanto sobre la costa o en las tierras del interior, desde el rio Muluya en la frontera con Argelia, pasando por Rusaddir, cubriendo la parte Mediterránea hasta Tánger, y luego la parte Atlántica desde Tánger, pasando por Lixus hasta Mogador (Essaouira) considerada como última colonia fenicia en el Atlántico. El trabajo termina con una conclusión con los resultados más importantes de la investigación, que presenta la imagen de Marruecos como un territorio muy poblado, un miembro muy activo en el Mediterráneo Occidental, con una economía solida basada sobre la industria alfarera, la pesca, la agricultura, el comercio del vino, y la ganadería. Marruecos se muestra independiente, pero a la vez comparte una parte importante de su cultura con la Península Ibérica al que está unido con rutas marítimas al menos desde la Edad del Bronce. No obstante, el componente poblacional le distingue de la Península Ibérica.
La realización este trabajo, ha llevado a consultar documentación histórica, verificar datos arqueológicos, numismáticos y epigráficos, que han sido publicados por españoles y franceses durante la época del Protectorado, o posteriormente. Para ello, ha sido obligatorio visitar centros de investigación en Francia y España y Marruecos.
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