El intelecto agente es la cumbre de la teoría del conocimiento humano según Tomas de Aquino. Es personal en cada hombre; uno con el ser de cada persona humana; separado del cuerpo, sin mezcla con él; impasible y siempre en acto; luz cognoscitiva innata. Procede directamente de Dios, y de su Luz participa tanto natural como sobrenaturalmente, y esto último, tanto en la presente situaci6n (lumen fidei) como en Ia futura (lumen gloriae). Gracias a el somos libres y responsables, y por ello es condici6n de posibilidad de la ética y política. Permite conocer todo, porque activa las distintas facultades cognoscitivas humanas. Usa los hábitos cognoscitivos innatos como de instrumentos. Es perpetuo, pero tras esta vida no conocerá como ahora conoce.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados