El gran peligro que amenaza nuestras sociedades no tiene que ver con choques culturales, sino con una desigualdad desbocada. ¿Pueden ser viables modelos que dan la espalda a la mayoría?. Amplias capas de la población constatan que el 'ascenso social' ya no funciona, lo que aumenta la frustración.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados